Aquí no hay filtros. Solo verdades contadas desde dentro.

Este espacio está reservado para confidencias reales, anónimas.

Historias que muchos callan, pero todos sienten.

Si tú también quieres compartir la tuya (de forma totalmente anónima), puedes hacerlo al final de esta página.

Todos me preguntaban cuánto tiempo estaría fuera. Cuándo volvía.
Nadie preguntó si estaba bien emocionalmente. Me sentí invisible. Como si mi valor fuera solo lo que podía rendir en el campo.

— Jugador de 18 años

Durante meses pensé que lo estaba motivando. Le hablaba de constancia, de que no se rindiera, de que todo esfuerzo tiene recompensa.
Pero él solo quería disfrutar, no competir. Hoy me doy cuenta de que yo estaba proyectando mis miedos en él.

— Padre de niño de 13 años

“Mi hijo empezó a odiar el fútbol, y no lo vi venir…”

“Me lesioné y nadie me preguntó cómo estaba de verdad.”